Hay algunos días en que simple y sencillamente nos sentimos llenos de alegría, de luz en sintonia con toda la energía angelical y espiritual. y otros en los que nuestra existencia es gris y oscura, no permitimos que la luz entre en nuestro halo de negatividad, teniendo en nuestra mente solo pensamientos y sentimientos que que no van de acuerdo a la vibración que cada uno tiene en su esencia.
En estos momentos es cuando nos desconectamos con la divinidad, alejamos a nuestros ángeles por medio de la oscuridad, nos encontramos en un callejón sin salida.
Lo mas importante es reconocer que estamos pasando por un proceso de baja vibración para salir de el, solo podernos hacerlo cambiando nuestros pensamientos, la felicidad se encuentra en nuestro interior y de ahí se expande a todos los sentidos, actos, pensamientos etc.
Una forma de hacerlo es:
1- Acudir a nuestro sitio favorito, cerrar los ojos y despejar la mente con respiraciones .
2- Visualizarse en una maravillosa piscina no de agua si no de luz liquida; que tu ángel de la guarda vuela cerca de ti para ayudarte mientras nadas y despiertas tu verdadera naturaleza angélica.
3- Mientras sumerges tu cuerpo, imagina una sensación cálida que se extiende por todo tu ser y observa como empiezas a cambiar, es cuando las células de tu cuerpo se transformaran, evolucionando para asumir tu potencial espiritual.
4- Repite en tu mente lo siguiente; "le pido a los ángeles que despierten mi verdadera naturaleza e incrementen mi vibración, pido que mi propósito sea vuelto a mi vida".
5- Imagina que tu ángel te calma con el suave sonido de su voz, el aire a tu alrededor esta lleno de aromas agradables, cuando estés listo sal de la piscina y visualízate brillando con luz dorada.
6- Invita a tu ángel guardián a entrar en tu cuerpo, vizualízalo caminando en tu interior. Siente como tu cuerpo se transforma con mayor rapidez.
7- Una vez terminado este proceso, imagina a tu ángel guardian llevándote a un plano superior con los demás ángeles para disfrutar de la belleza del paraíso. Después de un rato de relajación, es hora de que regreses a la piscina y te vistas con algo cómodo que te guste.
8- Es momento de volver, abre tus ojos lentamente sin perder la respiración.
Nota: puedes realizar este ejercicio cada día para equilibrar y conectar con tu ser interior.
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